Siempre resulta más fácil echarle la culpa a los demás, al contexto, al gobierno, al COVID o a la vida misma de los errores que cometemos; así que esta es la historia de cómo un sitio de 7 Millones de visitas se fue a la mierda por culpa de Hostgator.

Fue en el año de 2007 cuando hice mi propio blog. En este blog escribía y subía cosas que me encontraba navegando en internet. Así lo hice durante tres años hasta que recibí un correo de hostgator diciéndome que habían suspendido mi página debido a que en pocas palabras recibía mucho tráfico y tenía que actualizar a un plan superior, pero mucho muy superior.

Para ese entonces el blog ya me generaba ingresos mensuales por patrocinadores y anuncios de Adsense.

Si me dolió pero al mismo tiempo, no le di demasiada importancia al tema. Deje que pasara, ignoré la solicitud porque por otro lado estaba pasando una situación familiar, acababa de ser padre y tenía en mi cabeza otras prioridades.

Pero durante esos 3 años, sin darme cuenta, fui descubriendo parte del mundo digital. Desde posicionamiento orgánico (SEO), creación de contenido, análisis de tráfico, monetización de sitios web, email marketing, pago por click, creación de páginas web, entre otras cosas.

Se que si hubiera atendido positivamente el correo de hostgator, mi humilde blog hoy por hoy seguiría como uno de los más visitados. Aún existe, pero los más de 3,000 artículos que publique como enfermo durante 3 años casi todos los días ya no están.

Se fue al carajo por culpa de hostgator, pero también por mi falta de experiencia en el tema. Se ahora que un proveedor de hosting de 14usd al mes, que te promete ancho de banda ilimitado, en realidad no es ilimitado. Tendría que haber escalado o buscado otro proveedor.

Pero no tenía el tiempo, ni la cabeza y todo mi dinero en ese entonces se iba en comprar leche y pañales.

No me arrepiento, lo volvería a hacer. Pero no tenía en ese entonces un balance entre lo personal y lo digital.

Lecciones aprendidas

¿Qué se puede aprender de perder un blog que empezó de cero a 7,000,000 de páginas vistas totales durante sus mejores años?

Mucho...

Aquí 5 lecciones que te pueden servir tanto para tu sitio como para tu negocio:

1. Prepárate para escalar: Cuando un negocio comienza a crecer en línea, es crucial estar listo para actualizar los recursos y la infraestructura (como el hosting en esta historia) para manejar el aumento del tráfico y las demandas de velocidad con los usuarios del sitio.
2. Ten un balance entre prioridades personales y de negocio: La inexperiencia y las responsabilidades personales pueden afectar las decisiones comerciales. Siempre será buena idea contar con un plan, equipo o socio que pueda ayudarte a manejarlo cuando tus prioridades personales o inexperiencia afecten a tu negocio.
3. Aprender de la experiencia: Perder esa inercia que traía el blog luego de tanto trabajo y esfuerzo, es una gran experiencia de aprendizaje. Lo mismo puede pasar en tu negocio, nadie esta excento de cometer errores o de que pasen cosas que no están bajo nuestro control.
4. Resiliencia: A pesar de todo, continuar. La resiliencia es una cualidad crucial en el mundo de los negocios digitales, pues los resultados la gran mayoría de las veces no son inmediatos, requieren tiempo, esfuerzo e inversión.
5. Ojo con tu proveedores: Así como seleccionas a la pareja o amigos, es importante evaluar y seleccionar proveedores confiables que puedan crecer y adaptarse a las necesidades que pudieras tener en el futuro.

Moraleja: No esperes a que una crisis o el cambio externo te obliguen a actuar, yo perdí un blog; tú podrías perder un negocio.